Remodela tu guardería a bajo costo

 

Te damos ocho sencillas ideas para que durante este periodo vacacional le des un nuevo look a tu guardería sin gastar de más.

1. Recibidor. Es la primera impresión que los padres o cualquier otra visita tendrán de tu guardería. Renueva el color de las paredes, agrega plantas y cambia los cuadros de la pared.  

Si tienes sillones, puedes cambiar las fundas decorativas de los cojines. Con estos sencillos toques darás una nueva personalidad al recibidor.

2. Pisos. Los azulejos y mosaicos suelen ser costosos, pero tener algunos rotos o desprendidos, además de dar mal aspecto representan un riesgo de tropezones.

Invierte en los dañados, y si algunas zonas están desgastadas cámbialo. Te recomendamos usar pisos epóxicos o de caucho, son más baratos, resistentes y antigolpes que la loseta y azulejo. Si no es necesario hacer reparaciones, limpia y pule los pisos.

3. Paredes. Sin duda, es el cambio más evidente de un espacio. Es económico y te permite darle una nueva apariencia a todos los espacios. Recuerda emplear la psicología del color a fin de despertar la creatividad en los niños, o mantenerlos en un estado de relajación.

Lee aquí: Guía de color para cada zona de tu guardería

 

4. Accesorios. Mira los pequeños detalles. Puedes renovar los accesorios de iluminación, los jugueteros y las canastas del material didáctico. Estos artículos pueden parecer insignificantes, pero cambiarlos puede hacer una gran diferencia en la apariencia.

5. Recicla y reutiliza. Reemplazar muebles puede resultar caro. En su lugar lija y repinta mesas, sillas de trabajo, estantes y libreros, lo cual es mucho más barato. Si hay mobiliario que definitivamente debes cambiar, te sugerimos adquirir piezas usadas. Son significativamente más baratos.

6. Otros detalles que pueden ayudarte es homologar todas las cerraduras de las puertas, limpiar las ventanas y resanar esas pequeñas grietas que dejan los clavos por cuadros u otros objetos decorativos.

7. Cambia vidrios rotos y limpia los existentes.

8. Las puertas de acceso de la calle y la entrada principal deben estar en buen estado.

Con estos cambios que no representan presupuestos altos, estarás listo para recibir el año y a los pequeños de tu guardería con espacios relucientes.