alergias

5 mitos sobre las alergias a las mascotas

5 mitos sobre las alergias a las mascotas 

Las alergias a las mascotas son la reacción física del cuerpo a la caspa de los animales (las escamas de piel), pero también puede haber alergias a la orina, la saliva e incluso a las heces de una mascota. Según la Fundación de Asma y Alergias de América (AAFA), hasta 30% de las personas con alergias tienen reacciones alérgicas a gatos y perros.

A continuación, te mostramos algunas ideas erróneas sobre las alergias a las mascotas. Conocer la realidad sobre estos mitos, te ayudará a tomar medidas para vivir cómodamente con estos miembros de la familia.

También lee: Qué debes hacer frente a las alergias

Mito 1. El pelo de las mascotas, especialmente el pelo de gato es lo que provoca alergias.

Contrariamente a la creencia popular, no es el pelo de las mascotas lo que hace que un niño estornude. Son las proteínas que se encuentran en la orina, la saliva o la caspa de las mascotas, según la AAFA.

Lo que es cierto es que los animales con más pelo tienen más probabilidades de portar otros alérgenos como polvo y polen.

Si tienes una mascota en casa hay que limpiar con frecuencia todos los espacios, para eliminar constantemente la caspa que puede desencadenar reacciones alérgicas, además de bañar con frecuencia a las mascotas.

Mito 2. La exposición continua a los animales eventualmente eliminará las alergias.

Si uno de tus hijos tiene alergia a los animales confirmada, no mejorará al aumentar la convivencia. De hecho, puede empeorar, según la Sociedad Australasia de Inmunología Clínica y Alergia.

Sin embargo, los estudios han confirmado que convivir con gatos, perros y otros animales en la primera infancia puede reducir el riesgo de desarrollar reacciones alérgicas y asma más adelante en la vida.

Mito 3. Hay ciertas razas de perros y gatos o especies que no generan alergias.

No es verdad. Todas las razas de perros y gatos producen caspa. Sin embargo, se cree que algunas razas son mejores para personas alérgicas.

Mito 4. Los roedores no generan alergias.

Incorrecto. Los hámsters y conejillos de indias también pueden desencadenar asma y alergias. Algunos padres optan por mascotas pequeñas como el hámster u otros roedores para sus hijos alérgicos, pero incluso estos animales pueden provocar alergias cuando los niños entran en contacto con sus excrementos u otros fluidos corporales. Piense en su entorno: cuando los animales están en sus jaulas no pueden evitar sus excrementos. Esto entra en su pelaje y luego puede causar reacciones cuando el niño juega con ellos.

Para niños con alergia una mascota recomendable puede ser aquella sin pelaje, como peces, tortugas u otros reptiles.

Mito 5. Mantener a las mascotas fuera de casa resuelve el problema de alergias.

No necesariamente. Debido al tamaño microscópico y forma irregular, los alérgenos de las mascotas se adhieren fácilmente a la ropa y otras telas, transportándose a otros lugares.

¿Cuáles son los síntomas de alergia a las mascotas?

Los síntomas de las alergias a las mascotas incluyen congestión nasal, picazón, ojos llorosos y sibilancias. Algunos niños también pueden presentar un ataque de asma si sus alergias se intensifican.

Para saber si un niño es alérgico a una mascota, antes de acudir con un especialista podrías hacer lo siguiente: observa a tu hijo jugando con la mascota. Debes intentar prestar atención a cómo está antes y después de estar en contacto con el animal. También podría ser útil que el niño pase tiempo fuera de la casa, por ejemplo, una noche de fin de semana en casa de la abuela o en algún otro lugar sin mascotas para determinar si los síntomas han desaparecido.

Si crees que tu mascota está causando alergias, acude con un especialista. Las pruebas son muy importantes para determinar la causa real de la alergia.

Algo importante que debes saber es que no por el hecho de que los niños sean alérgicos, significa que deben deshacerse de las mascotas. Dependiendo del grado de alergia, con un tratamiento podrían tolerar la convivencia con los animales.